Antes hechos tan tristes como la muerte de una persona, por lo menos es de agradecer la transparencia informativa, gracias a la cual se puede ver como ocurrió el accidente, así como la actuación del conductor humano.
Lo que no resulta tan creíble, ni aceptable, son las conclusiones que se pueden leer en la prensa e internet, principalmente la de que"el accidente era inevitable", veamos porqué:
En la primera captura, vemos como delante del coche, que viaja a unos 60 km/hora, se crea una zona de sombra muy negra entre dos farolas, (que he enmarcado con el óvalo azul), que produce un contraste muy fuerte con las zonas iluminadas; a su vez, delante de la sombra se vuelve a recuperar visibilidad, e incluso luces de otros vehículos en la carretera:
Una décimas más tarde es visible el reflejo de las zapatillas en el suelo de la carretera, en el centro del carril, sin que el vehículo reaccione en modo alguno:
Esta secuencia implica que, en el momento en que comienza la grabación, la persona y su bici se encontraban aproximadamente aquí:
La distancia en el momento en que se inicia el vídeo la podemos estimar en unos 10 metros, por lo que si el radar del coche hubiera actuado correctamente debería haber reducido la velocidad del vehículo en este momento, (o bastante antes, ya que la carretera es recta y la persona comenzó a cruzar la vía entre 1 y 2 segundos antes de este momento). Esta reducción hubiera bastado para evitar el impacto, ya que la victima se encontraba a punto de salir del área de peligro al producirse el impacto. ¿Por qué el radar no lo detectó entonces? El fabricante del vehículo advierte en su propia web de que en determinadas circunstancias el radar puede no funcionar adecuadamente.
Los que pasamos muchas horas en la carretera sabemos bien las situaciones de peligro que se provocan por situaciones especiales de luminosidad, como en este accidente, con la luz del amanecer de frente, o con determinados destellos del sol cuando está bajo. El coche autónomo tiene que utilizar un radar 100% efectivo que complemente el análisis visual, o lamentablemente veremos más situaciones de este tipo.
Este accidente no era evitable para un conductor humano, pero debiera haberlo sido para un coche autónomo. Deberían suspender cualquier test hasta que los vehículos no dispongan de un radar 100% efectivo.
Lo que no resulta tan creíble, ni aceptable, son las conclusiones que se pueden leer en la prensa e internet, principalmente la de que"el accidente era inevitable", veamos porqué:
En la primera captura, vemos como delante del coche, que viaja a unos 60 km/hora, se crea una zona de sombra muy negra entre dos farolas, (que he enmarcado con el óvalo azul), que produce un contraste muy fuerte con las zonas iluminadas; a su vez, delante de la sombra se vuelve a recuperar visibilidad, e incluso luces de otros vehículos en la carretera:
Una décimas más tarde es visible el reflejo de las zapatillas en el suelo de la carretera, en el centro del carril, sin que el vehículo reaccione en modo alguno:
Un segundo más tarde se produce la desafortunada colisión, por el lado derecho del vehículo y con el viandante a punto de salirse de impacto:
Esta secuencia implica que, en el momento en que comienza la grabación, la persona y su bici se encontraban aproximadamente aquí:
La distancia en el momento en que se inicia el vídeo la podemos estimar en unos 10 metros, por lo que si el radar del coche hubiera actuado correctamente debería haber reducido la velocidad del vehículo en este momento, (o bastante antes, ya que la carretera es recta y la persona comenzó a cruzar la vía entre 1 y 2 segundos antes de este momento). Esta reducción hubiera bastado para evitar el impacto, ya que la victima se encontraba a punto de salir del área de peligro al producirse el impacto. ¿Por qué el radar no lo detectó entonces? El fabricante del vehículo advierte en su propia web de que en determinadas circunstancias el radar puede no funcionar adecuadamente.
Los que pasamos muchas horas en la carretera sabemos bien las situaciones de peligro que se provocan por situaciones especiales de luminosidad, como en este accidente, con la luz del amanecer de frente, o con determinados destellos del sol cuando está bajo. El coche autónomo tiene que utilizar un radar 100% efectivo que complemente el análisis visual, o lamentablemente veremos más situaciones de este tipo.
Este accidente no era evitable para un conductor humano, pero debiera haberlo sido para un coche autónomo. Deberían suspender cualquier test hasta que los vehículos no dispongan de un radar 100% efectivo.
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